Alcalde de Celaya admite reunión con grupo criminal, pero niega haber pactado

26 de noviembre del 2025

Juan Miguel Ramírez afirma que fue convocado bajo engaños y que rechazó exigencias de dinero y puestos públicos

El encuentro que detonó la polémica

El alcalde de Celaya, Juan Miguel Ramírez Sánchez, reconoció que antes de asumir el cargo sostuvo una reunión con integrantes de un grupo criminal. Según su versión, acudió engañado al encuentro, pues le habían asegurado que se trataba de empresarios interesados en dialogar. Al llegar, descubrió la verdadera identidad de los asistentes.

Durante la reunión, los criminales presuntamente le exigieron dinero y posiciones dentro de su administración, peticiones que aseguró rechazó de inmediato.

Nunca he tenido acuerdos con criminales

Ramírez Sánchez insistió en que no tiene pactos con ninguna organización delictiva y afirmó que su postura es clara: no ceder a presiones criminales. Relató que al momento de la reunión su acompañante temió por su vida, lo que incrementó la tensión y los llevó a retirarse tan pronto como fue posible.

El edil aseguró que asumió la presidencia municipal con la convicción de servir y no permitir que intereses ilegales influyan en su gobierno. Incluso reveló que su familia ha tenido que tomar medidas de protección debido al clima de inseguridad.

Un gobierno bajo presión

La declaración ocurre en un contexto complicado para Celaya, municipio marcado por altos niveles de violencia y hechos que han estremecido a la política local. El alcalde recordó que su administración enfrenta amenazas constantes y que su prioridad es mantener la estabilidad del municipio, sin confrontar directamente al crimen organizado, competencia que dijo corresponde a los gobiernos estatal y federal.

Contexto de riesgo político y social

El alcalde subrayó que, pese a las intimidaciones, continuará trabajando por la ciudad. Comentó que su familia ha tomado decisiones difíciles, como la renuncia de su hija a un cargo municipal tras recibir amenazas. Aun así, afirmó que no permitirá que grupos criminales condicionen su labor ni la vida pública de Celaya.